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miércoles, 27 de noviembre de 2013

AMANECE DE NUEVO

AMANECE DE NUEVO…

Sueño mil veces con otro mundo.
Quizás esta vez me acompañe la suerte.
Hoy solo hay dolor,
la ilusión me empuja hacia ti.

Sé que no hay esfuerzo,
ni dolor en vano.
Como el agua poco a poco,
te escapaste de mis manos.
Pero aún quedo yo,
tu corazón late en mi.

Me  despertaré
con el cielo al alba.
Te abrazare, no te soltaré.
Sigues aquí a mi lado.
Mientras tenga un corazón.
Por ti andaré.

Me despertaré
cuando el alma no llore,
cuando tenga de nuevo ilusiones.
Mientras busco un nuevo amanecer,
tú descansa, mi amor.
Que vivir, lo intentare yo.

Me enseñaste a vivir
A mirar la vida sin miedo
A no rendirme
A ver la solución
A no huir

Ahora despertaré
Porque tu eres el aire
Que impulsa mi vuelo
Das fuerza a mis alas heridas

Me mirare en tus ojos,
para no olvidar.
Hoy seré fuerte yo,
me dotare de valor.

Siempre en tu honor.

jueves, 21 de noviembre de 2013

TE ECHO DE MENOS



TE ECHO DE MENOS

Echarte de menos,
Es sentir el alma evaporarse al viento.
Es abrir los ojos y no verte.
Es implorar al cielo, sin recibir respuesta.

Echarte de menos,
Es el delirar de mi razón con tus recuerdos.
Llorar como una niña en el silencio.
Morir un poco cada día,
y sin embargo, seguir viviendo.

Echarte de menos,
Es atrapar con la ilusión,
cientos de mariposas.
Es creer que me esperas,
en otro lugar.

Echarte de menos,
Es despertarse, y no querer abrir los ojos.
Es evocar, el divagar mágico de tu mirada.
Es guardar tu voz bajo llave.

Echarte de menos,
Es dudar, de que alguien pueda entenderme.
Es lanzarse en busca del tiempo,
que hace poco, fue tan nuestro.

Echarte de menos,
es seguir caminando sin ti.


miércoles, 20 de noviembre de 2013

MUNDO DE LOS SUEÑOS


   MUNDO DE LOS SUEÑOS

   No sé dónde está,
   no sé dónde fue,
   no sé hacia dónde vuela.

   No sé dónde está,
   que alguien lo busque para mí,
   que esta noche no duerme conmigo,
   que esta noche me muero de frío.

   No sé dónde está,
   que alguien lo encuentre.
   Él es David, y yo soy Goliat,
   es tan pequeño,
   que no lo puedo encontrar.

No sé dónde está,
que alguien le diga,
que lo busco a oscuras.
que se me agotaron las fuerzas,
que no puedo seguir al frente de la batalla.

No sé dónde está,
no sé dónde fue,
no sé hacia dónde vuela.

El rumor del viento, me susurra,
que él al fin encontró,
su mundo perfecto,
su castillo de ilusiones y sueños,
su valle de la felicidad,
allí, donde trotan los unicornios,
donde le cantan las hadas,
donde juguetea con los duendes.

Mundo de los sueños.
Allí de donde nadie,
regresará jamás.

martes, 12 de noviembre de 2013

DONDE ESTAS CORAZON.

JOSÉ MANUEL, DONDE ESTAS CORAZÓN?


Yo soy ahora, al igual que antes,
el amor... tú luz... tú guía...
Permanezco protegido en tu recuerdo.
Me buscas fuera, aunque estoy dentro.

Si de verdad quieres contactar conmigo,
sal ya de tu morada,
me encontraras en todo lo que es hermoso,
y en todo lo que es cruel,
en las cárceles, en los hospitales,
con los niños, con los ancianos,
con los que pasan hambre, con los que pasan frío,
con los sin nombre, con los sin patria.

Despierta ya de tu letargo.
Comprende que nadie puede revelarte nada,
que no esté dentro de ti.
Huye del cómodo trono, donde te has instalado en la rutina.
Si necesitas refugio, que no sea en el pasado.

No me adores en imágenes que ya no me representan,
no me glorifiques, ni me albergues en altares.
Más si necesitas implorar mi regreso,
detente a escuchar el sonido de tu respiración,
y el pálpito de  tu corazón.
Porque  yo, sigo vivo en ti.

Conviértete por mí,
en un halcón, en un delfín,
en un león, o en un dios,
que fue, para lo que yo nací.

COSAS QUE CREO PUEDEN AYUDAR O NO...

QUE CREO QUE PUEDE AYUDAR Y QUE NO…

- Traten a los padres por igual. Los dos necesitan el mismo apoyo.
- Necesitamos que nos oigan, que nos escuchen.
- Permitirnos hablar de nuestro hijo muerto cuando lo necesitemos.
- Creo que hay que brindar especial atención a los hermanos, que aunque no ha sido mi caso, los hijos necesitan la atención que sus padres en esos momentos no pueden brindarles.
- Anoten la fecha de nacimiento y de muerte del hijo y recuerden dichos aniversarios.
- No piensen que la edad del hijo determina su valor e impacto para la familia.
- No tengan miedo de abrazarnos, a veces se echa de menos.
- No digan que saben cómo nos sentimos, si no han pasado por algo similar.
- No sugieran que ya vendrán otros hijos o que por defecto que agradezcan los que tienen, en el caso de otras familias.




LA ESPERANZA

LA ESPERANZA

Hay que reconocerlo, el duelo de los padres es todavía una dimensión desconocida para los que no han pasado por lo mismo, ni siquiera hay una palabra para definir nuestra situación. Hay viudos y huérfanos, pero nosotros sólo somos padres sin hijos. Sin ese hijo al que deseamos besar y abrazar.

Nos quedamos con los brazos vacíos, con el corazón roto y el alma desgarrada. Perdemos toda ilusión por seguir viviendo, y sepultamos cualquier intento de superar el duelo, porque no queremos, necesitamos echarlo de menos, necesitamos llorar, necesitamos recordar, nos gusta nuestra pena…

Hoy en día mi esperanza es el recuerdo de mi hijo José Manuel y mi hija Alegría, por ellos me levanto todos los días, me miro al espejo y le digo al reflejo de esa cara, sonríe que tus niños te miran.






lunes, 11 de noviembre de 2013

EN BUSCA DEL SENTIDO

EN BUSCA DEL SENTIDO

Yo nunca me pregunto ¿porque yo? ¿porque me paso esto a mi? Eso me suena tan egoísta, tan egocéntrico, porque lo que de verdad me pregunto es, ¿porque mi hijo?.

Para lo que no obtengo ninguna respuesta, ninguna que me consuele, ninguna que me deje mas tranquila. Lo único que me consuela, que me alivia, es que mi hijo ya no sufre, ya no siente dolor, ya descansa.

Pero no niego, que aun sigo enfadada con Dios, yo quiero tener a mi hijo conmigo, quiero que me bese, quiero sentir su cuerpecito, quiero abrazarlo…

Hay que reconocer que el duelo te lleva a elegir una opción fundamental de vida: o te hundes o aceptas que tienes una herida en el corazón, una cicatriz que siempre te va a doler y salir adelante.

Yo he elegido, aceptar mi dolor y seguir adelante, agradecer que estoy vida, e intentar vivir la vida como si hoy fuese el ultimo día, y que aunque no es fácil, aunque a veces duele, se lo debo a mi hijo, ya que el una y otra vez me regañaba diciéndome “mama triste no”, pues eso, mama triste no cariño, te lo prometo.